Allí estabas, al final de una cola multitudinaria para recibir tu ración diaria de agua, delante de ti una familia con varios hijos que suplicaban un poco de clemencia
al guardia encargado del suministro, que les trataba como basura, para él solo eran números, la hija mayor de la familia había intentado escamotear algo más de agua de la ración que
les correspondía, para su hermano pequeño y el guardia había entrado en cólera.
El guardia
Él era el encargado del suministro y a él correspondía que todos los ciudadanos recibieran su correspondiente dosis diaria de agua en base
a su clasificación personal/social y de él dependía que el sistema siguiera funcionando como un reloj suizo.
A él ya todo le daba igual, en el pasado había tenido familia, era un hombre familiar y le importaban las personas, pero ahora nada importaba, él sabía perfectamente, que el presente era un aciago destino para la humanidad, no tenía ningún tipo de esperanza.
Desolado, miraba como aquellas tierras fértiles de su juventud, llenas de naranjos, limoneros, vegetación frondosa y ríos de escarlata, etc. eran ahora eran un completo erial, miraba desolado esas tierras áridas totalmente
desnutridas, por las sequías que durante décadas habían estado azotando a ese territorio, después de la que situación climatológica se hiciera irreversible allá por el 2050, miraba el cielo cubierto por la calima y se deprimía.
Todos los días pensaba en quitarse del medio, pero algo dentro de su ser se lo impedía en el último momento, esos malditos genes de supervivencia
implícitos en el ser humano le impedían acabar con ese tormento, lloraba mientras soltaba el revolver y las imágenes de sus hijos desnutridos y moribundos mientras él y su mujer los portaban en brazos volvían a su cabeza.
Comparada con la vida de aquel guardia, tu vida había sido bastante sencilla, profesor de biología, tu vida había pasado entre frascos y probetas, tú y tus colegas científicos quisisteis advertir al mundo
de lo que estaba aconteciendo, pero a el (más bien a sus representantes) no parecía importarle demasiado, atrapados en un sistema capitalista viciado de base, nadie había querido durante años ponerle el cascabel al gato y ahora ya era demasiado tarde.
Antaño acciones de desobediencia muy bien coordinadas por todo el país os habían dado influencia, y junto con otros grupos formabais parte del triángulo eco-terrorista en el que os clasificaron los gobiernos.
Ahora con el paso del tiempo la nostalgia vuelve a tu mente, y se te forma un nudo en la garganta cuando tienes que hablar de ello, en ese momento aún erais jóvenes e ilusos y pensabais que si alzabais vuestra voz la gente tomaría
las calles y derrocarían gobiernos, pero no fue así… Tal vez subestimasteis el poder de los gobiernos y sus aparatos de intoxicación informativa o tal vez sobrevalorasteis la opinión crítica de la gente.
Lo que está claro para ti, es que todos esos años de lucha fueron en vano…
Durante 30 años habías olvidado toda esperanza, te dedicabas a pasear por los mismos lugares, una y otra vez, museos, bibliotecas, … Convertidos en centros refugio de las tormentas tropicales y el calor abrasivo.
Calles y callejones llenos de toldos para protegerse del sol, el maravilloso mercado de frutas y verduras frescas, ahora se había convertido en una especie de desguace de tecnología obsoleta, montones de baterías, placas, chips, recuerdos
de una generación tecnología que había llegado su cenit.
Phil te había encargado que le compraras un micro pic x765 y una miniplaca solar Solart45, para sus experimentos Solar Punk.
Admirabas a Phil por su entereza, Phil era el único colega que aún conservabas de aquellos tiempos de activismo medioambiental, era un gran tipo que había dedicado toda su vida a luchar contra las corporaciones que estaban envenenando el mundo y que había pegado un muy alto precio.
mientras construía y daba nueva vida a sus cacharritos eco-tecnológicos, que podrían salvarnos, Phil era un firme defensor de la teoría solar punk y creía que la tecnología haría un mundo mejor, tú despotricabas contra esa idea, porque para ti ese afán desmesurado por la tecnología nos había llevado al declive.
Phil y Sara(su compañera) eran soñadores, de ese tipo de personas que siempre tienen la cabeza en las nubes, imaginando y creando, siempre con un fin altruista, pobres, ilusos, te decías, no lo vieron venir.
Phil y Sara
Phil y Sara se conocieron a finales del año 2023, jóvenes estudiantes, activistas sociales y medioambientales querían cambiar el mundo con la tecnología, siempre trabajando con sus placas y prototipos, de ellos salió el código del primer implante neuronal completo con interfaz sináptica. Ellos, no querían que las grandes corporaciones, abusaran de su poder para implementar un producto caro y elitista al que solo pudieran acceder la clase vip. El metaverso era ya una realidad y veían grandes posibilidades en él, para construir una nueva internet más social, abierta e inclusiva.
Pasaron 7 años entre investigaciones y cacharrero, cuando al final pudieron liberar el firmware de su implante e interfaz, su plan era conseguir montar un pequeño grupo que pudiera construirlo y venderlo a un precio justo y asequible, pero las corporaciones tenían otros planes.
Las corporaciones llevaban tiempo fabricando el metaverso y necesitaban de dispositivos para conectarse a él, y esa interfaz era una pasada, así que pusieron en marcha toda su maquinaria, empezaron a difundir la idea que el firmware contenía bugs de principiantes, que provocaba enfermedades coronarias graves, botulismo y otro sin fin de problemas.
Los medios propiedad de aquellas corporaciones se encargaban de difundir las mentiras de su amo, ya no había medios independientes, la matriz de antaño había sido desguazada por partes y adquirida por las corporaciones y gobiernos, los terminales de conexión, con la escasez de suministros de material primas, eran prácticamente un lujo que solo muy pocos podían conseguir, así que el hacktivismo underground se basaba en pequeñas estaciones satélite en forma de nodos locales, que se mantenían con cacharros que eran prácticamente chatarra y que rara vez tenían posibilidades de conectarse a la matriz.
Así, el firmware de Phil y Sara, llego a manos de las corporaciones, a través de presión judicial, y tuvieron que prácticamente regalárselo.
El resto es una triste historia, Sara y Phil cayeron en un estado de depresión, que les postro en cama durante años, Phil cayó muy enfermo y para su desgracia a él y a Sara el gobierno les denegó la autorización de suministro de agua diario, por crímenes contra la salud pública(por las mentiras de su firmware) y solo le autorizo una ración semanal. Phil estuvo a punto de morir de deshidratación, pero al final solo quedo impedido de cintura para debajo, lo que Phil no sabía era que Sara había estado quitándose agua de su ración para dársela a Phil al ver que este no mejoraba, acabó de los años Sara murió.
Continuará…
Me gusta mucho… ficción de lo más realista :D
Tienes un don para la verborrea